Mujerzotas

Un día sin mujeres en México
como señal de protesta

Como se ha hecho de manera consecutiva ya desde hace varios años, el 9 de marzo, un día después del día mundial de la mujer, en algunos países se practicará un paro masivo por parte de las éstas. Esto se hace con un solo propósito, encontrar la respuesta a la pregunta, ¿qué pasaría en un mundo sin mujeres? Sabemos que esto tendría un millón de consecuencias, no sólo biológicas y sociales, sino también económicas y políticas. Yo en lo personal, apoyo este paro al 100% y me gustaría compartirte una reflexión que escribí hace algún tiempo sobre todo este tema.

Un día sin nosotras. 

Me apena decir que una gran parte de mi vida me encontré dentro de una burbuja que protegía mi vista de la realidad, que me cegaba de las injusticias que acechan en cada esquina del mundo. Pero las burbujas se rompen fácilmente y la mía hace mucho que se reventó. Ahora estoy consciente de la cantidad injusticias que suceden todos los días y cómo afectan a más personas de las que soy capaz de contar, y ahora puedo ver lo cerca que están realmente.

Sin embargo, muchas de estas injusticias son ignoradas, cosa que, a mi parecer, empeora la situación. Desgraciadamente, hoy, en México, las víctimas de muchas de esas injusticias son las mujeres.

Una desventaja con la que me encontré cuando mi burbuja se reventó es el miedo que empecé a sentir.

Cada minuto de cada día mi cerebro reproduce una película de pensamientos que me dejan intranquila y hacen que me pregunté ¿qué pasaría si yo fuese la siguiente? Para mí la impotencia es uno de los peores sentimientos, saberque hay algo mal y no poder hacer nada al respecto para cambiarlo es algo que hierve mi sangre.

Por esto apoyo el paro del 9 de marzo, aunque sea por un día puedo dejar de sentirme impotente, haciendo algo para que las futuras generaciones de mujeres no sientan el miedo que siento yo hoy y para que ninguna de ellas tenga que vivir las tragedias por las que muchas ya nos dejaron.

 

A esto llegamos. ¿Qué otros medios quedan? Si se hacen protestas pacíficas, las plegarias no son escuchadas. Después de años de intentar que las voces de las mujeres sean escuchadas sólo se ven dos opciones, ahogarse dentro del silencio impuesto por la sociedad o dar un último grito todo a pulmón.

Entonces se empiezan a tomar medidas más drásticas, sin embargo las peticiones siguen sin ser escuchadas, pero eso sí la prensa crítica las formas. A todo esto, ¿qué es lo que se pide? Lo mínimo indispensable, el respeto. El respeto a la dignidad humana que sólo por nacer tienen hombres y mujeres. El respeto a los derechos humanos que sólo por nacer tienen hombres y mujeres. El respeto que por alguna razón se les da a los hombres, pero a las mujeres no. No se pide más.

¿Qué se hace después de que se agotaron todos los recursos para que sean escuchadas súplicas de las mujeres en México? ¿Cuál es el siguiente paso en esta guerra que no se tendría que luchar? Enseñar al resto de la sociedad todos los ¿Y si?, ¿Y si no hubiera mujeres? ¿Y si no se pone un alto a esta violencia? Ya lo decía James Brown en su canción de 1966,

 Un día sin mujeres en México como señal de protesta sólo está demostrando lo que Brown anunció desde 1966.

It’s a Man’s Man’s Man’s World, “This is a man's
world, but it wouldn’t be nothing without a
woman or a girl”.

Es imposible no desilusionarse al conocer las estadísticas diarias de la violencia contra la mujer en México. Es imposible que estas no provoquen miedo en una. Pero eventos como el 9 de marzo verdaderamente traen esperanza a mi corazón, ver como ninguna de nosotras está sola, nos tenemos la una a la otra. Si juntas podemos paralizar a una de las metrópolis más grandes del mundo, juntas conseguiremos que nuestras voces sean escuchadas.

Hay tantas cosas que me gustaría decir en este ensayo, pero no hay palabras suficientes para expresar lo que significa para mí esta protesta. Lo único que busco es que las futuras generaciones puedan vivir en un mundo mejor, donde su mayor preocupación sea qué película verán en la noche y no si van a regresar a sus casas con vida al salir. Yo sólo quiero que algún día exista un motivo real para celebrar el 8 de marzo como día de la mujer y no esté lleno de ironía.

Así acabe mi reflexión. Puede parecerte un poco pesimista, pero yo lo considero más bien realista. Desconozco si te gusta escribir o no, a mí me encanta, por algo estas leyendo esto. En un día en el que me sentí desesperada, decepcionada y francamente asustada, escribir esto me ayudó a tranquilizarme, a poner mis pensamientos y sentimientos en orden y hacerme la pregunta, ¿qué puedo hacer yo para mejorar esta situación? ¿cuál es la parte que me corresponde?.

Este 9 de marzo te invito a ser parte del paro nacional, a no usar ningún tipo de dispositivo que se conecte a internet, a no salir de tu casa, a no hacer nada que contribuya económica, política y socialmente al país, y te invito a agarrar una pluma y un papel y escribir tu propia reflexión, ojalá que algún día, cuando estés lista, me la puedas compartir.